La ansiedad también puede ser conocida como descontento, nerviosismo, preocupación
o temor.
¿Qué es la ansiedad y cuál es su relación con el cáncer y sus tratamientos?
- La ansiedad es un sentimiento o una sensación inquietante que a menudo se experimenta
cuando se enfrenta una situación abrumante de tensión e incertidumbre.
- La ansiedad
puede conllevar temor a lo desconocido (no saber qué puede pasar) o temor a lo conocido
(saber qué puede pasar).
- En algún momento, todos los seres humanos sienten ansiedad,
aunque las causas son muy diferentes en el caso de cada persona.
- La ansiedad
puede ser leve, moderada o grave. La ansiedad grave tiene consecuencias físicas
tales como náuseas, diarrea, colon irritable e incluso puede afectar al sistema
inmunitario (al disminuir la resistencia del organismo frente a las enfermedades). La
ansiedad grave también puede incidir sobre la capacidad para pensar con claridad
y afectar el rendimiento en el trabajo, las relaciones y las actividades diarias.
¿Cuáles son los síntomas que deben vigilarse? La ansiedad debe
incluir al menos tres de los siguientes síntomas:
- Preocupación excesiva acerca de varios acontecimientos o varias actividades
-
Tensión muscular
- Cambios en el sueño (dificultades para dormir o dormir más
de lo habitual)
- Desasosiego
- Síntomas físicos como, por ejemplo, aumento
del ritmo cardíaco, sudor, palpitaciones, temblores, disnea, opresión en el pecho,
náuseas, diarrea, eritema, mareos o aumento de la presión arterial
- Agotamiento
-
Dificultad para concentrarse
- Irritabilidad
- Dolencias físicas
Qué puede hacer para controlar la ansiedad
provocada por el cáncer
IDENTIFIQUE:
- ¿Qué factores hacen que aumenten sus riesgos de sufrir ansiedad?
- Factores
hereditarios
- Antecedentes de ansiedad o crisis de angustia
- Antecedentes
de diabetes o hipertiroidismo
- Vivir con una enfermedad crónica como el cáncer
-
Estrés abrumador en su vida
- Efectos de algunos medicamentos y de la quimioterapia
-
Falta de información o de control
- Síntomas físicos no aliviados (como el dolor)
-
Alcoholismo o drogadicción
- Cualquier cambio persistente en su capacidad para
manejar el estrés
- Cualquier cosa que le provoque ansiedad o la empeore
-
Cualquier cosa que lo ayude a aliviar la sensación de ansiedad
DISMINUYA LOS RIESGOS DE SUFRIR ANSIEDAD POR EL CÁNCER:
- Siempre que sea posible, reduzca sus riesgos (por ejemplo, evite el alcohol para
aliviar los síntomas).
- Consiga una técnica que le funcione para reducir la ansiedad
y utilícela (como, por ejemplo, respirar en forma lenta y profunda, inhalando y
exhalando, 15 veces).
- Siga su plan de tratamiento y tome los medicamentos exactamente
de la manera como le fueron recetados.
- Su médico podrá derivarlo a un psicólogo
para que lo ayude a encontrar maneras de enfrentar su situación. En los casos de
ansiedad grave, aceptar la ayuda de un profesional es tan importante como tomar
los medicamentos. La ansiedad continua o grave puede afectar su salud física, mental
y emocional.
- Al comenzar el tratamiento, lleve un diario sobre cómo se siente.
Informe a su profesional de atención médica si los síntomas mejoran o empeoran.
-
Aprenda y practique nuevas formas de controlar el estrés en su vida.
Medicamentos que su médico puede recetar para minimizar los efectos de
al ansiedad provocada por el cáncer:
- Lorazepam (Ativan®)
- Diazepam (Valium®)
- Clonazepam (Klonopin®)
-
Alprazolam (Xanax®)
- Clorpromazina (Thorazine®)
- Buspirona (BuSpar®)
-
Haloperidol (Haldol®)
Si siente ansiedad debido al cáncer o a los tratamientos de quimioterapia,
las siguientes pautas le servirán para saber cuándo
debe llamar a su médico o proveedor de atención médica:
- Si tiene preguntas acerca de su tratamiento.
- Si los síntomas empeoran o
son más frecuentes.
- Si tiene posibles reacciones a los ansiolíticos. Las
reacciones dependen de muchos factores, entre ellos la forma en que su cuerpo responde
a tipos específicos de estos medicamentos. Entre las reacciones que pueden presentarse
se encuentran las siguientes:
- Mayor ansiedad
- Amnesia temporal
- Somnolencia
- Respiración
lenta
- Pensamientos confusos
- Sedación
- Rigidez en los movimientos
y el habla
- Sensación de depresión
Nota: Insistimos en recomendarle que hable con su profesional
de atención médica acerca de su enfermedad y sus tratamientos específicos. La información
incluida en este sitio Web tiene como propósito ser útil e instructiva, y en ningún
caso debe considerarse un sustituto del asesoramiento médico.